Cuando comenzamos a hacer Marketing Digital, en la mayoría de los casos, creemos que podemos arrancar sin un plan de acción, pero ¿cómo puedes tomar el timón de un barco sin las coordenadas de hacia dónde irás? De seguro terminarás perdido en el medio del océano.

Por esta razón, es importante tener una estrategia que te asegure que se están tomando las decisiones adecuadas acorde a las necesidades y los objetivos de tu empresa, y así comenzar con el pie derecho el camino hacia conseguir más clientes e incrementar tus ventas a través de Internet.

Tener un sitio web, estar en las redes sociales y hacer campañas de Email Marketing son canales de comunicación muy efectivos y más económicos que vivir de la publicidad. Efectivos si tienes una estrategia definida, y más económicos porque puedes crearte una cuenta gratis en la mayoría de ellas, personalizar tu perfil, y compartir y aprovecharlo para compartir el contenido que tú quieras a quienes tú decidas.

Cómo comenzar con una estrategia de Marketing Digital

Como mencionamos anteriormente, un plan de acción de Marketing dependerá de tu empresa, tus necesidades y tus objetivos. Sin embargo, una estrategia básica de Marketing Digital consta de los siguientes pasos:

1. Conocer a fondo nuestra marca: tenemos que ser capaces de identificar las características y  personalidad de nuestra marca ¿Estamos dando la imágen que queremos? ¿nos sentimos identificados? Para poder crear nuestra identidad y reflejarla en todos nuestros activos digitales un buen ejercicio es comenzar con definir nuestra misión y visión.
2. Conocer a nuestro comprador ideal: ¿es adolescente, joven adulto, adulto o adulto mayor? ¿qué características debería tener? ¿cuál es su forma de pensar? Este estereotipo de nuestro potencial comprador se llama Buyer Persona y es el segundo paso más importante para comenzar nuestra estrategia digital. Debemos conocer a quien queremos venderle, a quién vamos a llegar con nuestro producto o servicio.  
3. Conocer a nuestra competencia: Es importante saber qué está haciendo nuestra competencia y que relación tiene con nuestra audiencia. De esta manera, podemos ajustar nuestro contenido a lo que el mercado y el público necesita de nosotros.
4. Elegir los medios adecuados: Siempre debemos tener un sitio web y un Blog Ahora quizás te preguntes ¿qué red social?¿utilizo el Email? Aunque parezca mentira, la respuesta a estas preguntas es siempre sí. Además esta decisión surgirá automáticamente al analizar el perfil de nuestros usuarios y saber dónde encontrarlos.
5. Planificar el contenido: Sabemos a quién queremos llegar, ahora toca definir qué vamos a decirle para volvernos una referencia de confianza y acercarlo a nuestra marca. Es necesario planificar un calendario de publicaciones optimizado constantemente según el feedback que recibimos de nuestra audiencia. Es decir, si identificamos que un tema tiene más repercusión que otro, lo debemos tener en cuenta a la hora de planear los siguientes contenidos que serán relevantes.
6. Publicar y dar seguimiento: Hay que estar atento a las repercusiones que nuestros contenidos generan y escuchar los comentarios de nuestros seguidores y darles una respuesta en caso que sea necesario. No nos olvidemos que el feedback es una parte esencial de las redes sociales. Después de todo, ellos son quienes deciden invertir su tiempo y dinero en tu marca.
7. Medir resultados: Siempre tenemos que estar analizando los indicadores que muestren si estamos en el buen camino o no, si estamos cumpliendo nuestros objetivos y si la estrategia funciona.

Todos estos pasos forman parte de lo que llamamos Inbound Marketing, una metodología de trabajo que pone a tu cliente en el centro de tus procesos de marketing, ventas y servicios para tener una visión integral.